La Justicia también tumba la causa penal contra el alcalde por el ‘Caso Oposiciones’

Villanova exige la inmediata dimisión de los concejales de IU por ¿haber hecho bandera de una gran mentira durante 5 años¿. La jueza da carpetazo al asunto en un breve auto, al acordar el sobreseimiento y archivo tras no encontrar delito en los procesos de adjudicación de plazas en el Ayuntamiento

Apenas dos meses después de haberse desestimado el recurso contencioso-administrativo de Izquierda Unida, que afectaba a 43 trabajadores del Ayuntamiento -calificado por la Prensa como el ‘Caso Oposiciones-, ahora la Justicia también ha decidido tumbar la causa penal que pesaba contra el alcalde, Joaquín Villanova, a propósito de este asunto. Dicho proceso también afectaba a miembros de la Corporación Municipal y a técnicos de varias administraciones, y tenía relación con el acceso a la Función Pública de más de un centenar de empleados municipales. En concreto, el Juzgado de Instrucción número 3 de Málaga ha dictado un auto, de fecha 30 de diciembre de 2011 y dado a conocer el pasado 20 de enero, en el que acuerda el sobreseimiento provisional y el archivo de la citada causa penal, al entender que no aparece ¿debidamente justificada la perpetración del delito en la adjudicación de plazas en el Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre¿.

El texto, firmado por la magistrada-juez Fuensanta López Ávalos, ocupa apenas dos párrafos en los que da carpetazo a las diligencias previas del procedimiento 1543/2008, tras haberse practicado varias pruebas de investigación por parte de la Policía Judicial de la Guardia Civil. En concreto, las conclusiones del Instituto Armado, en las que se basa la resolución de la magistrada, constatan fehacientemente que un organismo ajeno al Consistorio, como es el Departamento de Administraciones Locales de la Consejería de Gobernación y Justicia de la Junta de Andalucía, encargada de supervisar los procesos selectivos de acceso a los distintos puestos de trabajo de las corporaciones locales, ¿no tiene constancia de irregularidades¿ en las pruebas de acceso a la Función Pública llevadas a cabo en el Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre.

Así, de acuerdo con la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LEC), la jueza ve procedente decretar el sobreseimiento provisional de las actuaciones, sin tener que llegar a celebrarse vista oral alguna. Igualmente, puesta la resolución en conocimiento del Ministerio Fiscal y demás partes personadas, a día de hoy no existe constancia de que nadie haya interpuesto recurso de reforma o de apelación en el plazo reglamentariamente estipulado, de modo que la causa, de confirmarse la inexistencia de reclamación alguna, se consideraría extinguida y terminada.

Con esta resolución de la titular del Juzgado de Instrucción número 3, se pone fin al llamado ‘Caso Oposiciones’ en su vía penal, después de casi cinco años de ¿grandes mentiras, calumnias y falacias vertidas y sostenidas por los concejales y concejalas de Izquierda Unida de Alhaurín de la Torre¿, una causa de la que ¿han hecho bandera todo este tiempo y que ahora debería llevarles a una profunda reflexión y a dimitir de forma inmediata¿, en palabras del alcalde, Joaquín Villanova, muy satisfecho por el auto de la jueza y su contenido.

VENGANZA PERSONAL

El mandatario señala: ¿En abril de 2010, cuando el caso se encontraba en la fase inicial de la instrucción, ya dije que se trataba de una venganza de un grupo limitado de personas, un perverso juego repleto de pavorosas teorías de la conspiración sobre presuntos fraudes y tramas oscuras de contrataciones ilegales, que inició un extrabajador municipal resentido y con ánimo de venganza, espoleado por el abogado de siempre y por otras pocas personas que me tienen ojeriza y solo pretenden quitarme de en medio¿. Para el regidor, ¿hoy es un gran día, porque todo ha quedado debidamente acreditado ante la Justicia. Los autores, promotores e instigadores de esta persecución contra mi persona han vuelto a quedar en ridículo ante el pueblo¿, recalca.

Villanova cuestiona, no obstante, ¿quién nos restituye ahora el honor ante la Opinión Pública, tras cinco años de pesadilla, de juicios paralelos en los medios de comunicación y de artimañas malintencionadas impulsadas por el entorno del letrado de siempre, con el fin de contaminar la instrucción con sus delirantes declaraciones públicas contra esta Institución Local, contra sus dirigentes políticos, contra sindicatos y técnicos de la Administración, pretendiendo exclusivamente crear una atmósfera enrarecida y borrar de un plumazo la presunción de inocencia¿.

El alcalde cree que en este breve y conciso auto judicial, la magistrada ¿no solo da carpetazo a una causa penal, sino que tumba radicalmente la mínima credibilidad que les quedaba a IU-CA y a sus tenebrosos directores de orquesta¿. Porque, ¿una vez más, los jueces han dado la razón al Ayuntamiento, al validar la absoluta legalidad de sus actos administrativos, en los que ni miembros del equipo de gobierno, ni técnicos municipales, ni técnicos de otras administraciones han cometido irregularidad alguna¿, sostiene.

¿Dijimos -continúa Villanova- que teníamos confianza plena en la Justicia y así ha sido: no hay ni rastro del cúmulo de barbaridades, fraudes ni ilegalidades que nos imputaron. Lo que está claro es que sus instigadores no pedirán perdón ni rectificarán un ápice sus posiciones acerca de esta sucia maniobra política, nacida puramente del rencor; antes al contrario, ahora dirán que los jueces han sido inducidos erróneamente por la Defensa y querrán mantener las dudas sobre la limpieza de los procesos, pero la verdad está ahí, resumida en dos párrafos¿.

Por último, el mandatario quiere compartir su alivio y alegría con los casi 130 funcionarios que podrían haberse visto afectados por una revocación de sus nombramientos, derivada de alguna resolución judicial en tal sentido, ¿algo que habría resultado insólito en la historia de la Democracia Local, por obra y gracia de este grupo de talibanes, de ‘terminators’ que solo han perseguido, persiguen y perseguirán inhabilitar a este alcalde y a este equipo de gobierno o, al menos, desgastar nuestra imagen torpedeando la gestión municipal¿.