El Centro Cultural ‘Vicente Aleixandre’ estrena un nuevo concepto de Hemeroteca

La sala, inaugurada ayer, aúna los servicios de centro de lectura, consultas e Internet. Cuenta con zonas de descanso y un diseño moderno. Ocupa la antigua sala de arte. El alcalde anuncia la digitalización de 6.000 expedientes

El Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre ha culminado el proceso de remodelación del Centro Cultural ‘Vicente Aleixandre’ con el traslado de la Hemeroteca Municipal ‘Alberto de Mersseman’, inaugurada ayer por la tarde en un acto multitudinario. El alcalde, Joaquín Villanova, ha destacado la profunda transformación experimentada por este equipamiento desde principios de año, y ha subrayado el salto de calidad del servicio de hemeroteca, que apuesta por un nuevo concepto como fusión de centro de lectura, consultas, puntos de acceso a Internet y áreas de descanso.

Los trabajos han supuesto el traslado de buena parte de los archivos, colecciones y fondos bibliográficos, debidamente ordenados y catalogados, hasta su nuevo espacio, que ocupa la planta de la antigua sala de exposiciones. La Hemeroteca ha abandonado los sótanos que ocupaba en la misma manzana de la calle Jabalcuza desde el año 2000, unas dependencias que se habían quedado pequeñas, obsoletas y muy deterioradas.

Curiosamente, de de esta forma se ha devuelto el antiguo uso de la sala cuando se inauguró en 1983 la entonces llamada Casa de Cultura, puesto que allí se encontraba la biblioteca pública. Las tareas han corrido a cargo del personal de las áreas de Cultura y Servicios Operativos, que dirigen Isabel Durán y Carmen Doblas respectivamente. Se ha habilitado un suelo más acorde con su nuevo uso, sustituyendo la moqueta color mostaza por tarima flotante; se han pintado las columnas de color marrón y las paredes lucen un adecuado color crema que potencia la entrada de luz natural por el gran ventanal.

La iluminación se ha adecuado a las condiciones óptimas de lectura y estudio, se ha mejorado el hilo musical de la sala, además de habilitar puntos individuales de escucha con auriculares. También se han reordenado los espacios para centralizar todos los servicios sala de estudios, sala de lectura de prensa y zona wi-fi y de Internet, que conserva los diez terminales independientes. La gran novedad es la incorporación de una zona de descanso con un pequeño office. Un gran sofá preside el centro de la sala, donde se podrán leer los diarios y revistas. Además, se ha decorado la sala con la obra ‘Las mujeres de Picasso’, donada en su día a Alhaurín de la Torre por la artista chilena Ximena Yutronic y que antes ocupaba una de las paredes del vestíbulo del Centro Cultural.

La nueva Hemeroteca supone un avance cualitativo y cuantitativo de los servicios integrados, al pasarse de 35 plazas que tenía de aforo máximo el anterior espacio, a más de un centenar. El aspecto moderno, funcional y multimedia del nuevo recinto también contribuye a una mejor atención ciudadana y una mayor carta de servicios, además de la comodidad y excelente imagen estética. El traslado es provisional y transitorio hasta tanto se construya la futura nueva biblioteca municipal, que absorberá todos los servicios.

Numerosos vecinos pudieron comprobar ayer el nuevo aspecto de la Hemeroteca, que alberga archivos y documentos con más de 30 años de antigüedad. El alcalde ha aprovechado para anunciar un proyecto para la digitalización de hasta 6.000 expedientes, con el objetivo de facilitar las consultas y el acceso a la información a todos los ciudadanos. Villanova ha agradecido el trabajo llevado a cabo por Cultura y por los Servicios Operativos, al tiempo que ha recordado el proyecto para la construcción de una nueva Biblioteca Municipal, que ampliará notablemente el espacio de la actual y que integrará también el servicio de hemeroteca.

REFORMA DEL CENTRO CULTURAL

El Centro Cultural ha experimentado una profunda puesta a punto y mejora general para su adaptación a los nuevos tiempos y la renovación de su imagen. El recinto acaba de cumplir nueve años tras su anterior remodelación, por lo que las Concejalías de Servicios Operativos y Cultura decidieron diseñar un plan de trabajo en dos etapas.

Como se recordará, la primera fase quedó lista en febrero y afectó a las escaleras de acceso al resto de plantas, con la instalación de zócalos de madera de roble para proteger las paredes de rozaduras y huellas. También se actuó en el estucado de las paredes, cuyo antiguo color salmón fue sustituido por ocre en las plantas superiores y en las escaleras de emergencia laterales. Las barandillas de la escalera principal y sus paredes quedaron en rojo burdeos. Las paredes del vestíbulo se pintaron en blanco roto, para darle continuidad a la estética de la actual sala de exposiciones, que fue habilitada en la planta baja, en la una de las dos salas de proyecciones. El vestíbulo, desde entonces, forma parte del espacio expositivo, con rieles a lo largo de toda la estancia, para colgar los objetos de muestra.

Aquella primera fase también incluyó el arreglo de las ventanas de aluminio dañadas y la supresión de humedades, además de la sustitución de las tapicerías de algunas butacas del salón de actos, dañadas por el uso y el paso del tiempo. El interior de los camerinos lucen igualmente un mejor aspecto y unas óptimas condiciones de accesibilidad al escenario a través de la pasarela existente, además de sustituirse la luminaria halógena del edificio por bombillas LED de bajo consumo.

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